Destete precoz: riesgos y beneficios para el recién nacido

La curiosidad, las necesidades personales o la influencia social pueden afectar la elección de cuándo realizar el destete. Sin embargo, esta es una fase fundamental en la vida de un recién nacido (de hecho se da en el primer año) que supone la introducción de alimentos sólidos y en todo caso distintos a la leche materna. Las pautas oficiales indican que el destete solo debe comenzar después de los 6 meses, pero ¿y si se comienza antes de este período? Conozcamos mejor el destete precoz , lo que implica y cuáles son los posibles beneficios y riesgos para la salud del recién nacido.

¿Qué es el destete precoz?

Como la propia expresión sugiere, el destete precoz es el comienzo de la transición a una dieta que ya no se basa exclusivamente en la leche antes del sexto mes. Hoy hablamos de destete precoz, pero en realidad el momento de cuándo iniciar la transición a la alimentación complementaria ha ido cambiando con el tiempo .

En la década de los setenta, de hecho, existía una indicación generalizada de emprenderla hacia el tercer mes de vida , mientras que en la década de los ochenta a partir del cuarto. Solo recientemente (después de 2000) se ha sugerido comenzar el destete alrededor del sexto mes de vida.

La razón de este cambio se debe, como suele suceder en estas materias, al acceso a información, datos e investigaciones que antes no existían y que han cambiado el conocimiento de un tema específico.

También hay que señalar que las indicaciones de los organismos internacionales , incluida la Organización Mundial de la Salud, suelen ser genéricas y existe una ligera discrepancia entre las distintas directrices. Esto se debe a que estas recomendaciones van dirigidas a todos los recién nacidos , tanto a los de países ricos y desarrollados donde el acceso a tratamientos y alimentos cualitativamente saludables o especialmente desarrollados para la edad pediátrica es mayor, como a los más pobres que tienen que lidiar con una realidad que está profundamente alejado de lo que deberían ser los estándares de seguridad, higiene y alimentación.

Destete precoz: ¿tiene algún beneficio?

Es importante precisar los motivos por los que las directrices oficiales sitúan en torno al sexto mes el mejor momento para iniciar el destete. En primer lugar, hay que aclarar que el destete es el abandono paralelo de la exclusividad de una dieta basada en leche y la introducción de diferentes alimentos.

La recomendación de comenzar no antes del sexto mes es el resultado, en primer lugar, de los cambios que sufre la leche materna, que comienza a perder la cantidad de sales minerales y vitaminas que justificaban su uso exclusivo durante los primeros meses. Por eso, más que destete, hablamos de alimentación complementaria , ya que la leche sigue estando presente pero con la adición de otros alimentos que ayudan a asegurar el aporte nutricional necesario para el crecimiento del niño .

Tanto la leche materna como la leche artificial tienen el aporte nutricional necesario para cubrir las necesidades del bebé; cualquier otro alimento, por lo tanto, crearía un desequilibrio.

También hay razones relacionadas con los reflejos del bebé y sus habilidades. Antes de este período, de hecho, es incapaz de tragar alimentos sólidos , al igual que no abriría el trago a la vista de la cuchara . También alrededor del sexto mes, los niños pueden agarrar objetos con las manos de forma autónoma (también útil para el destete ) y pueden mantenerse sentados en la silla alta.

¿No hay beneficios, entonces, en el destete precoz? De hecho, algunas guías (como la de EFSA, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria ) reconocen que en algunos lactantes, aunque sea en un pequeño porcentaje, es necesario un destete precoz para asegurar un crecimiento y desarrollo óptimos. Sin embargo, este es un estudio de caso mínimo que no representa la norma y que debe ser evaluado individualmente. Sin embargo, EFSA señala que el destete temprano no puede comenzar antes de la decimoséptima semana de vida.

De la misma opinión también la ESPGHAN ( Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica ) y la Academia Americana de Pediatría que fija el límite máximo más allá del cual no se debe pasar para iniciar el destete precoz en el cuarto mes de vida.

Daños y riesgos para el recién nacido

Aunque hay indicios sobre los posibles beneficios del destete precoz, no faltan investigaciones y estudios que ponen de manifiesto una serie de cuestiones críticas , tanto para el bebé como para la madre.

Para el recién nacido, de hecho, el destete temprano se asocia con un mayor riesgo de:

• Diarrea;
• síndrome de muerte súbita del lactante ( SIDS );
• infección del tracto respiratorio inferior ;
• Diabetes tipo 1;
• leucemia

Para las madres, sin embargo, el riesgo está asociado con:

• cáncer de mama ;
• diabetes;
• cáncer de ovarios;
• hipertensión;
• infarto de miocardio.

También por este motivo (además de todos los beneficios para el desarrollo y la salud del niño), las guías internacionales recomiendan que, incluso después del destete, se continúe con la lactancia durante todo el año de vida del niño.